Amado Nieva-Balderas
La violencia contra las mujeres tenie sequelas tan severas que afectan mas que a las victimas. Muchas mujeres que fueron víctimas de violencia y abuso sufren un trauma cual nunca procesan. Ese trauma luego empieza a corromper cada aspecto de su vida. Algunas mujeres son más cautelosas al estar cerca de un hombre, otras empiezan a odiarse a ellas mismas, y muchas viven con el mal recuerdo atormentando las a cada rato. En ocasiones este trauma suele ser heredará a sus hijas. La madre advierte a su hija que tenga mucho cuidado para evitar vivir la misma experiencia. Muchas hijas viven con el miedo de la madre a pesar de nunca sufrir de abuso. Esta es la experiencia de Fausta; la madre de Fausta fue violada en la guerra civil de Perú por unos guerrilleros. El trauma que vivió su madre los traspasa a su hija. Según su creencia indigena, Fausta fue transmitida este miedo por la leche de su madre la cual le llaman La teta asustada. Durante toda la película vemos como Fausta se siente incómoda estar cerca de un hombre. Está aterrorizada de vivir lo mismo lo cual provoca que tome acciones drásticas. Fausta busca la manera de darse una infección en el útero para poder asquear a los asquerosos. Al final de la película vemos que este trauma empieza afectar la salud física. Ya que su infección en el útero empieza a provocar desmayos. Ya no queriendo vivir con el trauma Fausta se somete a la cirugía para curar su infección así liberándose del trauma que heredó por su madre. Aunque la película no nos demuestra si Fausta supera su fobia en contra de los hombres. La película nos demuestra que el trauma causado por la violencia en contra las mujeres puede ser heredado.